Siendo las 6 de la mañana, me baño, desayuno y me dirijo al terminal de buses que parte hacia la entrada a la Selva Central del Peru. No encontré ninguna movilidad que vaya directamente desde Lima hacia Pozuzo, salvo tours contratados lo cual no es la idea en este tratado.
Desde Lima hay dos empresas que dan el servicio de transporte : "Merced" y transportes "Junin". (Me llevó casi una semana averiguarlo). Al menos son las más sugeridas.
La carretera es asfaltada y está en muy buenas condiciones. No hay necesidad de comprar con anticipación el pasaje salvo en fechas especiales, con llegar antes de las 8 am es suficiente.
El tramo incluye pasar por el punto ferroviario más alto del mundo conocido como TICLIO. Muchas personas sufren el mal de altura o "soroche" al pasar por esta zona. Si quieres evitar en vez de experimentar hay una pastilla llamada Coramina Glucosa que puede ayudarte a prevenir los estragos. Se consigue en cualquier farmacia sin necesidad de receta, incluso en la parada que hace el bus para almorzar antes de pasar por Ticlio. Por alli se me taparon las orejas por la altura y ya llegando a Tarma, dpto. de Junin; senti un dolor de cabeza por el brusco cambio de presión y temperatura. Comenzó a hacer un calor del que no sentía desde el verano en Buenos Aires.
En Lima hacía frio intenso al momento de mi partida lo que me hizo llevar algo de abrigo para el camino. Lo cierto es que la selva casi siempre es calurosa.
En las 8 horas de trayecto conoci al amable Sr. Efrain quien fue el primero en comentarme sobre el desarrollo que tienen los proyectos relacionados al desarrollo de la agricultura. De hecho, el trabaja en proyectos del estado y es uno de los principales responsables que de las cosas sucedan por esta zona. Me contó que también habían desarrollado proyectos aplicando terapia homa.
Todo viaje siempre es una oportunidad para conocer gente y aprender de ellos; y en este viaje sucedió más de lo que esperaba.
Aquí unas fotos de lo que se ve en el trayecto:
Ya al finalizar la octava hora justo quince minutos antes de llegar al destino,el bus se avería y empieza a salir mucho humo. Parecia que iba a explotar. De haber sucedido esto a mitad de camino hubiera sido tragico porque de seguro que alli nos quedabamos hasta que alguna ayuda llegara como le ha pasado a otros amigos viajeros.
Por suerte, agonizante llego el bus a su destino, botando humito.
Siendo alrededor de las 4pm llegue a La Merced. Calurosa, bananera y super cafetalera como ella sola.
Datos:
- Siempre es bueno ir con algo de música o lectura.
- Si vomitas en el viaje no importa, sucede en las mejores familias.
- En el camino hay menú desde S/. 5 en adelante.
- Verifica que el bus tenga baño antes de beber demasiados líquidos. El camino es largo.
- Sonrie y el mundo sonreirá contigo
3 comentarios:
muy bonito relato.
Muy bonito relato.
Me gusta como lo narras, tan sincero, pues sí, el mal de altura es de lo peor en su momento, pero no es para preocuparse tanto. Yo he vomitado un par de veces, pero cuando viajas más te acostumbras. Lleven caramelo de limon (aunque no lo crean ayuda mucho) para que lo chupen cuando tengan la sensacion de vomitar. Por suerte ahora ya no es tan difícil viajar hasta La Merced desde Lima. Por si regresas alguna vez te dejo este link, para que puedas elegir la ruta adecuada y adquirir pasajes de bus a buen precio.
https://busportal.pe/es/rutas/pasajes-de-bus--lima-todos--la-merced Luego desde La merced ya puedes hacer escala en otras ciudades de manera mucho más fácil. Lo de llevar buena música y un libro es básico para cada viaje, yo no salgo sin un buen libro y sin mi playlist de rock en español.
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